Una de las decisiones más importantes a las
que te enfrentas cuando vas a ser padre es decidir el nombre de tu futuro hijo.
En algunas ocasiones puede llegar a provocar verdaderas peleas en las familias,
por suerte no ha sido nuestro caso, ya que cada persona tiene formas muy
distintas de elegir.
En algunos casos, ya no tan normales por
suerte, pero se sigue dando, el padre elige el primer nombre y la madre el
segundo, y lo normal es que se elijan nombres con tradición en sus familias.
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Otras veces se pone el nombre de los padrinos
elegidos, aunque cada vez hay menos padrinos, pero esto puede ser sustituido por
poner el nombre de alguien de mucha confianza o al que se le tiene mucho
cariño.
Una variante de la primera forma es que uno
de los padres (si es que hay dos) elija el nombre de un hijo y el segundo lo
elige el otro.
La última opción es que entre los dos se
llegue a un consenso.
Para nosotros elegir el nombre de Peque fue
bastante sencillo, la verdad. Yo tenía claras varias premisas:
-
no
sería un nombre repetido en la familia. Mi hermana, por culpa de eso, es “la
chica” y es bastante más grande que yo.
-
Tendría
que sonar bien acompañado de nuestros apellidos. Digamos que el apellido de
Churri tiene bastante “personalidad” y combinado con el mío el conjunto es
bastante fuerte y “redondo”, así que no cualquier nombre vale. Es cierto que
ya se pueden elegir los apellidos y el orden en el que ponerlos, y si le
hubiésemos puestos los apellidos de las dos abuelas, sonaría menos rotundo y
cualquier nombre quedaría bien, pero ahí sí que no había negociación posible.
-
Tenía
que gustarme la inicial. Soy muy de hacer labores y poner iniciales por todas
partes, así que era un factor importante a tener en cuenta.
-
And
last but not least, teníamos que elegirlo entre los dos. Sé que hay parejas que
se “turnan” los nombres, pero para mí eso tiene un inconveniente. Es verdad que
el que elijas te encantará, pero el que no puede horripilarte (conozco casos).
Prefiero que mis hijos tengan nombres que me convenzan, aunque no me encanten, antes
que acordarme del “puñetero dichoso trato” cada vez que nombre a alguno
En cualquier caso, en nuestra primera
elección no tuvimos problemas. Es un
nombre que me gusta hace años, y al padre también. En cuanto nos dijeron
que era niño, estaba decidido. (Menos mal, porque para niño lo tenía clarísimo,
pero con la niña la cosa es más difícil, no tengo ningún nombre que me convenza
al 100% y menos que nos guste a los dos) Churri planteó pensárnoslo un poco
más. Le dije que lo hiciera él, yo lo tenía claro, y que si le gustaba otro lo
comentaríamos, pero apenas unas horas después el tema del nombre estaba
cerrado.
En la familia a algunos les ha gustado y a
otros no tanto, pero yo creo que este tema es algo entre la pareja,
exclusivamente. El entorno puede ofrecer opciones y, si se le pregunta, dar
opinión, pero nada más.
Y vosotros ¿cómo elegisteis el nombre de
vuestros hijos? ¿os resultó difícil?
PD Chicas, si estáis en plena discusión
con la otra parte por el nombre, dejadlo para el final. Después del parto,
cuando preguntan cómo se va a llamar el bebé, suelen decir “lo que ella elija,
la pobre, lo ha pasado tan mal” jijijiji. En serio, conozco ya tres casos de
esos.